En 1791, durante el reinado de Carlos IV, España es todavía un vasto imperio y la Inquisición, en sus últimos coletazos, intenta reprimir las ideas que llegan de la Francia revolucionaria. En esa época de cambios, Goya se ha convertido en pintor de la corte; entre sus clientes se encuentran Lorenzo Casamares, influyente dominico del Santo Oficio, e Inés Bilbatua, joven hija de un rico comerciante amigo de Goya.
Este libro corresponde al mes de Noviembre de 2014. Puedes pasar por la Biblioteca, para recogerlo.
